Eclipse de Luna
-No me preguntes más, anda. Hay cosas muy grandes ahí fuera que están lejos de nuestro alcance y no podemos comprenderlas, hijo.
-Pero papá, ¡explícame porqué es tan importante esa pelota blanca que hay dibujada en el cielo!
-Verás, tan sólo piensa, que ese planeta va a vivir y ha vivido muchísimos, muchísimos más años de los que puedas imaginar que tú y yo juntos.
-¿Y más que mamá?
-Y más que mamá, la abuela, la prima Sara, todos tus amigos del cole, tu profesora buena, tu profesora mala, tú y yo juntos.
-Bueno papá, pero es que mamá hace tiempo que se fue, entonces no son tantos años...aunque no sé contar tanto.
-No, hijo mío, no me refiero a eso y lo sabes. Lo que quiero decir es que ese bloque de tierra ocupa tantos campos de fútbol que no podrías jugar en todos ellos ni en un año, y que se mueve más despacio que la máquina de coser de la abuela, pero que nunca se caerá del cielo.
-¿Pero dónde está el arriba y el abajo en el cielo? ¿O la Luna está en otro cielo? ¿Está en el cielo de mamá?
-Puede ser, cariño. A lo mejor la Luna estaba prendada de tu madre y por eso se la llevó; pero seguro que mamá es feliz, ella también la adoraba. Cuando seas mayor tú también te enamorararás de ella, y llevarás a alguna amiga a contemplarla contigo, tal vez una noche tan bonita como ésta, y te pondrás tan rojo como roja se está poniendo la Luna. Y entonces comprenderás que en algunas cosas no hay arriba ni abajo, que tu cielo tienes que elegirlo tú, y que somos muy pequeñitos, hijo, más pequeños que las hormigas al lado de lo que es la vida. Somos tan insignificantes que no valemos nada... Perdona pequeño, eso son cosas de mayores, no hagas caso de lo que te he dicho.
-No te pongas tristón papi...
-Tranquilo hijo, hoy no hay tristezas, hoy hay fiesta en la Luna y tu madre también debe estar poniéndose guapa. Vamos a ver el eclipse, anda...
Este texto saca sonrisas y casi lágrimas a partes iguales. Me encanta la inocencia infantil que lleva a hacer todo tipo de preguntas, sin miedo a las respuestas. Para un niño todo tiene que tener una explicación.
ResponderEliminarLa nostalgia del padre hacia la mujer perdida, la luna...me transporta a ese momento en los ojos del niño. Me encanta.
:) :) Wow, muchísimas gracias Oski, esas palabras de alguien que escribe tan maravillosamente como tú significan muchísimo para mí.
EliminarMe costó trabajo escribirlo en su día, me dan tanta pena esas situaciones que ufff. Pero al final hay que quedarse con las cosas buenas de la vida, y eso sí, nunca olvidar.
Gracias de nuevo, de corazón. Gracias.