Octubre es el mes de hierro del Otoño
Odio soñar con otros hombres cuando duermes conmigo.
Me gusta taparme con el edredón grueso y despertarme con menos peso en la piel.
Me gusta taparme con el edredón grueso y despertarme con menos peso en la piel.
Prefiero escuchar música que me entristece en esos días del mes, y en los demás.
Me gusta engañarme a mí misma y creerme que soy valiente.
Me alivia el aire fresco que pega en la cara cuando me encuentro enferma.
Quiero que me cuiden cuando lo estoy, lo necesito.
Quiero que me cuiden cuando lo estoy, lo necesito.
Sé que no estoy sola, pero me gusta autocastigarme.
Me gustas, yo no me gusto, y odio algunas cosas.
Arriesgo en las decisiones pequeñas, porque las grandes se me quedan grandes.
Detesto las cosas que no tienen sentido.
Prefiero las cuadrículas. No, es mentira. Dame un buen folio en blanco y crearé.
Adoro el verdeazul del mar y su olor.
Me gusta el tacto de la arena y como deja las uñas la sal.
Amo el Sol y lo que crea. Amo la lluvia y lo que destruye en su propia creación.
Sé que no soy nada, y eso es suficiente.
Por encima de todo, adoro el Otoño.
Tendría un romance con Octubre y una relación duradera con Noviembre.
Diciembre de mi corazón, compañía en cada estación.
Soy naturaleza, y puede que mis huesos lo hayan olvidado, pero mi alma no.
Me gusta mi alma, odio mi personalidad. No, me encanta.
Aborrezco los cambios, mis cambios, el cambio; a no ser que sea a mejor. Nunca lo es.
Me gusta el tacto de la arena y como deja las uñas la sal.
Amo el Sol y lo que crea. Amo la lluvia y lo que destruye en su propia creación.
Sé que no soy nada, y eso es suficiente.
Por encima de todo, adoro el Otoño.
Tendría un romance con Octubre y una relación duradera con Noviembre.
Diciembre de mi corazón, compañía en cada estación.
Soy naturaleza, y puede que mis huesos lo hayan olvidado, pero mi alma no.
Me gusta mi alma, odio mi personalidad. No, me encanta.
Aborrezco los cambios, mis cambios, el cambio; a no ser que sea a mejor. Nunca lo es.
Me gustas, y odio dormir sin soñar que estás conmigo. Odio que no lo estés.
Me gusta vivir.
Y no dejo de morirme.
Me encanta respirar, necesito respirar, ayúdame a respirar, a respirarte, a respirarme.
No quiero soñar verdades y vivir mentiras.
Quiero vivir. Odio morirme.
Me gusta vivir, y no dejo de morirme.
Y ya no puedo.
Me gusta vivir.
Y no dejo de morirme.
Me encanta respirar, necesito respirar, ayúdame a respirar, a respirarte, a respirarme.
No quiero soñar verdades y vivir mentiras.
Quiero vivir. Odio morirme.
Me gusta vivir, y no dejo de morirme.
Y ya no puedo.
Nunca podemos dejar de morirnos, es ley de vida, por eso hay que aprovechar cada instante y disfrutar todo lo que se pueda y un poquito más :-)
ResponderEliminarEntiendo ese continuo "cambio de planes", ese querer una cosa y luego otra y a veces incluso a la vez...
Le pondría banda sonora a esta entrada: http://www.youtube.com/watch?v=DgJ_741KcFY
Si ves que tal aciertas más con la canción :D
EliminarLa multipolaridad es lo que tiene, y los cambios de estación (las de metro, las de tren, y las del cielo).
Abrazos :)